domingo, 4 de septiembre de 2011

MADRID (II)

Como iba contando, me afilié a la Unión de Actores de Madrid, que es el sindicato de actores de Madrid. Te tratan muy bien la verdad, y sigo creyendo que algo harán por sus afiliados. Pero también te toman el pelo, como en todos lados. “La Bolsa de Actores” no funciona. En dos años que estoy, sólo me han enviado dos correos electrónicos para ofrecerme trabajos en Dinópolis en Teruel y en Terra Mítica en Benidorm. ¡Con dos cojones! Pero ahí sigo, afiliado, a ver si el nuevo presidente y su equipo hacen algo diferente.

Otra de las cosas que aprendés en esos primeros momentos en Madrid es que tienes que apuntarte en Agencias de Publicidad y Figurantes. Y no lo adivinaréis, pero también te engañan. Como a un imbécil. En fin, que te presentas en sus oficinas, con tu currículo y tu book de fotos, rellenas una ficha con nombre, edad, altura, color de ojos y de pelo y tus medidas (no preguntan por la del pene, pero casi) y entonces te catalogan: 18-25, 25-30, 30-40 y así dependiendo de tu edad, vas a un archivo u otro. Y esa es la forma en la que ellos te enviarán a un casting. No se si lo he dicho, pero estos personajes se quedan con un 20% de lo que ganes, si que alguna vez resultas elegido en un casting.

Lo más penoso es que son agencias que no discriminan y yo he llegado a ir a un casting para modelos de ropa interior, cuando mi cuerpo parece una patata. Llegué al casting y todo lo que había era chavales 4 o 5 años menos que yo. Todos guapérrimos y ultra moldeados en el gym (que supongo es lo que yo llamo gimnasio). Eso sí, todos muy tontos y muy pijos. Pero tontos de remate. Yo creo que ninguno había acabado la Educación Primaria. Reconozco que tuve suerte porque encontré un chaval en mi misma situación y además majísimo y estuvimos charlando del mundo en el que intentamos subsistir.

Total, que sólo publicidad no quieres hacer y entonces te propones encontrar repr... jajajaja represen... jajaj representante. Misión imposible. Vamos que lo de Tom Cruise en sus películas es fácil. Muy fácil. Mandas tres docenas de correos electrónicos con tus fotos y tu CV. Y si tienes la suerte de que te contestan, siempre recibes la misma respuesta:

“Muchas gracias por mandarnos tu material.
Le hemos echado un vistazo y tienes un gran futuro.
Por desgracias, nuestra cartera está llena y
no podemos representarte en este momento.
Lo sentimos y mucha suerte.”

Y, por si no lo sabéis, sin representante, no puedes acceder a pruebas para series, películas y teatro, pues es imposible saber cuando son. Pero los representantes no te representarán si no has salido en televisión. Y en televisión sólo sales si haces una prueba que te consigue un representante. ¿Veis la paradoja? La pescadilla que se muerde la cola.

También existe la posibilidad de ir a páginas de internet especializadas y buscar castings para hacer. Normalmente, son pruebas para cortos, pequeñas compañías de teatro amateur, algún largo y publicidad. En la mayoría de ellas te dicen que no hay dinero de por medio. ¿Y de qué vivo? ¿Del aire? Pero aún así, mandas tu material y te presentas a algunas. Yo hice un corto sin cobrar, pero me prometieron el material. Aún lo estoy esperando. Eso si, conocí gente majísima y me trataron como un rey. Y pude hacer con el personaje lo que yo quise y aprendí mucho de lo que es un rodaje.

También me he presentado a una prueba para una compañía que pedían actores/actrices con estudios (porque actores/actrices sin ellos hay miles, aunque estudiar no significa ser mejor o peor). Y me presento a la prueba. El director de la compañía nos cita en su espacia de trabajo, donde ensayan. Un salón de un piso. Dice que de todos los correos electrónicos recibido, nos ha seleccionado a nosotros tres por nuestro CV. Y lo primero que debemos hacer es... imitar a un mono ¡TACHÁN! Sorpresa. Pero no imitarlo sólo, si no sentirlo. Pero sentirlo de verdad. Ser el mono. Pensamiento: “Yo me voy de aquí, que no estoy pa' tonterías.” Pero ya que estaba me quedé. Y, además de ser una prueba improvisada, el nivel era tan bajo que, en fin...

Y hasta aquí un poco de mi experiencia en Madrid. Seguro que vendrán más en un futuro...

sábado, 3 de septiembre de 2011

MADRID (I)

Madrid. Capital de España. Lugar donde se genera más empleo para actores/actrices, ¿no? También es la ciudad con más actores/actrices por metro cuadrado.


Cuando empecé a estudiar, o quizás cuando me dí cuenta de que quería ser actor de verdad, pensé que mi destino final sería Madrid. ¿Por qué? Pues porque es donde crees que vas a encontrar trabajo y vivir de ello. Pero, ¡ah, amigo!, cuando llegas a Madrid las cosas no son tan fáciles. Mi aventura en Madrid ocurrió no hace mucho. Más o menos de enero a junio de 2011. Suficiente tiempo para darte cuenta de como funcionan las cosas por allí.


Para empezar, has estudiado 4 años en una ESAD (la de Murcia en mi caso) y te das cuenta de que no sabes como funciona, de como moverte en el mundillo. Digo yo que sería lógico enseñar a tus alumnos a como moverse por terreno tan fangoso. Pero necesitas tener un plantel de profesores con experiencia en el mundo laboral. ¡Que tontería! En fin, que en la escuela no te han enseñado a sobrevivir en la jungla... Vamos, que llegas a Madrid y no sabes que hacer. Pero entonces recibes un correo electrónico:


¡CURSO CON TONUCHA VIDAL! ¡ÚLTIMAS PLAZAS!

Tonucha es directora de casting de Globomedia.

Se ha encargado de seres como

ÁGUILA ROJA, EL BARCO, EL INTERNADO.


Entonces, mentes privilegiadas como la mía, se lanzan como locos a hacer cursos con estos directores de castings y/o directores de películas y series de televisión. Cursos que sólo son para sacar dinero a jóvenes ignorantes e incautos, pues pierdes 14 horas de tú vida inútilmente, y además en fin de semana. Y lo más importante, te soplan 300 €. Pero tú vas tan feliz y le entregas todo el material del que dispones y en compensación ellos te dan el video de lo que has hecho para usarlo para tu videobook, que luego estos directores de casting rechazarán porque no tiene el ritmo suficiente o la calidad interpretativa necesaria (en esto último estoy muy de acuerdo)


Durante estos cursos (yo hice y dos y nunca más) llegas a conocer a otros actores y actrices. Y alguno de ellos tienen un poco más de experiencia y te ayudan a como dar los siguientes pasos. Otros simplemente quieren pisar tu cabeza y pasar por encima de ti, pero esto irá en otro post del blog. Y te dicen: “Ves a la Unión de Actores de Madrid y date de alta.” Y claro, vas. Y allí te das de alta, pagas 11€ al mes y te ofrecen servicio jurídico profesional y el tablón de anuncios y dejar tu material en “La Bolsa de Actores”. Total que das de alta porque son muy amables y piensas que te ayudará en tu carrera en Madrid.


CONTINUARÁ...

viernes, 10 de junio de 2011

Hoy comienzo desde cero este blog. Cuando en su día lo creé, pensé en escribir acerca de lo que sería mi vida como actor. De ahí el título. Porque pensaba que había entrado en un mundo un poco absurdo. No sabía aún cuan equivocado estaba. ¡JA! Es mucho peor que eso. Empecemos por el principio.


absurdo, da.

(Del lat. absurdus).

1. adj. Contrario y opuesto a la razón; que no tiene sentido. U. t. c. s.

2. adj. Extravagante, irregular.

3. adj. Chocante, contradictorio.

4. m. Dicho o hecho irracional, arbitrario o disparatado.


Bien, esta es la definición de la RAE (Real Academia Española). Como podréis comprobar, es perfecta para definir un mundo extravagante e irregular. Carente de sentido. Chocante y contradictorio. Donde ocurren hechos y dichos irracionales, arbitrarios y disparatados en todo momento. ¿Qué por qué digo esto? La respuesta, en el siguiente párrafo.


Querer/ser artista es absurdo de por si. Significa no tener ninguna estabilidad en tu vida. No cobrar un sueldo cada mes por tu trabajo. No saber, por tanto, si llegas a fin de mes. No poder hacer planes más allá de un mes. Por lo tanto ser artista es absurdo por disparatado e irracional.


¿Significa eso que es una mierda querer serlo? Pues no. Al contrario, porque cuando consigues algo de lo que te sientes orgulloso, por lo que has peleado, hacer lo que te gusta (y si te pagan por ello tiene que ser la ostia) te llena la vida. Esa sensación de poder expresar algo que llevas dentro a través de cualquier expresión artística es algo que que es opuesto a la razón, pero maravilloso. Es decir, absurdo pero fantástico.


Por ello este blog lleva este título, absurdo a su vez.


Está es la primera entrada de muchas (o eso creo, que luego me leo, me doy vergüenza ajena y lo borro todo).


Hasta lo próxima,


De otro pringao absurdo.


PD: Ser actor/actriz es ser artista. Así lo recoge la RAE. Por si hay alguna duda al respecto:


artista.

1. adj. Se dice de quien estudiaba el curso de artes. Colegial artista.

2. com. Persona que ejercita alguna arte bella.

3. com. Persona dotada de la virtud y disposición necesarias para alguna de las bellas artes.

4. com. Persona que actúa profesionalmente en un espectáculo teatral, cinematográfico, circense, etc., interpretando ante el público.

5. com. artesano (‖ persona que ejerce un oficio).

6. com. Persona que hace algo con suma perfección.